El ERE no es solo un despido masivo: es una medida regulada, con requisitos muy concretos.
¿Qué es un ERE?
Un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) es un procedimiento legal por el que una empresa puede suspender contratos, reducir jornadas o despedir a varios trabajadores, por causas justificadas.
¿Cuándo puede presentarse un ERE?
La empresa debe justificarlo con al menos una de estas causas reconocidas por la ley:
- Económicas
Cuando hay pérdidas actuales o previstas, o una caída persistente de ingresos.
Ej.: facturación que baja durante al menos 3 trimestres consecutivos. - Técnicas
Cambios en los medios o instrumentos de producción que hacen necesario ajustar la plantilla.
Ej.: automatización de procesos. - Organizativas
Modificaciones en la estructura interna o en los sistemas de trabajo.
Ej.: cierre de departamentos o fusión de áreas. - Productivas
Cambios en la demanda de productos o servicios.
Ej.: bajada de pedidos, pérdida de contratos. - Fuerza mayor
Situaciones externas y graves que impiden continuar la actividad (incendios, catástrofes, conflictos bélicos, pandemia…).
Requisitos para aplicar un ERE legalmente
- Afectar a un número mínimo de trabajadores:
- 10 trabajadores en empresas de menos de 100 empleados
- El 10% de la plantilla en empresas de entre 100 y 300
- 30 trabajadores o más en empresas de más de 300
- Iniciar un periodo de consultas con los representantes de los trabajadores (de 15 a 30 días)
- Presentar toda la documentación justificativa ante la autoridad laboral
- Proponer un plan de recolocación y medidas sociales si se despide a más de 50 empleados
- Esperar resolución o silencio administrativo para formalizar despidos
Ojo: No es despido libre
El ERE debe ser negociado y justificado. Si no cumple las condiciones, puede ser impugnado en los tribunales por los trabajadores o los sindicatos.
Un ERE es una medida excepcional y regulada. Solo se puede aplicar cuando existen causas claras y demostrables, y siempre bajo el control legal y la negociación colectiva.
