Según un informe de la Confederación Española de Sociedades de Garantía, un 38% de las pymes asegura que su situación ha empeorado en los últimos 12 meses y cerca de 135.700 se considera vulnerable.
Sólo un 17,8% de las pymes afirma estar en situación de crecimiento y de mejora financiera y un 32,2% dice estar en una posición estable, de manera que la mitad de esta clase de tejido productivo, que representa al 90% del conjunto de las compañías españolas atraviesa por dificultades y afronta un futuro más que incierto.
Cerca de 2 millones de empresas necesitaron financiación en 2023. Esta necesidad de recabar recursos ajenos y de contar con apoyo externo es particularmente penoso en los actuales momentos.
A pesar de todo, y en relación con la evolución de ciertos factores clave para medir la competitividad, en 2023 se ha elevado el porcentaje de pymes que vende en mercados extranjeros, confirmándose de esta manera la recuperación de la base exportadora de pymes tras la pandemia.
En relación al mercado laboral, las perspectivas son muy moderadas, pues un 84,5% de las pymes considera que no aumentará su plantilla y que el empleo permanecerá estable en los próximos doce meses, mientras que tan sólo un 10,8% afirma que creará puestos de trabajo.
Para financiarse las pymes optaron en 2023 por el préstamo bancario (20%), las líneas ICO (20,1%) y las líneas de crédito (18,6%), siendo la Hostelería y restauración; y Comercio, talleres y servicios personales los que han tenido mayores necesidades de financiación.
Fuente: okdario.com