Europa está agotando sus ahorros relacionados con la pandemia de la Covid-19, a excepción de las personas más ricas que siguen guardando dinero. Esto significa que la economía no está recibiendo un impulso significativo del ahorro este año.
Durante la pandemia, la tasa de ahorro en la eurozona aumentó significativamente, llegando a un máximo histórico del 25,4% en el segundo trimestre de 2021. Esto se debió a que las restricciones llevaron a la gente a gastar menos en actividades como restaurantes y viajes, mientras que los ingresos se mantuvieron estables gracias a los programas de apoyo del gobierno.
Sin embargo, a medida que las restricciones se relajaron y la economía se recuperó, las personas comenzaron a invertir sus ahorros en bienes raíces y activos financieros y a pagar deudas. Además, los activos líquidos disponibles para el gasto se redujeron significativamente.
Los hogares más ricos tienen una mayor propensión a mantener ahorros en el banco, pero tienden a gastar menos de manera inmediata. Por otro lado, los hogares con menores ingresos suelen gastar más cuando tienen dinero disponible.
En resumen, los ahorros disponibles ya no están impulsando el gasto del consumidor y el crecimiento económico. Sin embargo, se espera que la caída de la inflación en los próximos meses ayude a aumentar los ingresos reales, lo que podría brindar cierto apoyo a los consumidores y a la economía en general. Parece que la bonanza económica inesperada causada por la Covid-19 ha llegado a su fin.
Fuente: dirigentes.digital.com